¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1512

Capitulo 1512

Elia vio a Bruno empujar la silla de ruedas de Asier hacia ellos.

Su respiracion se volvié pesada, su cuerpo se tensé y en su corazon surgié un dolor sutil pero intenso-de- manera instintiva.

Al ver a Asier, no pudo evitar recordar cémo hacia dos dias habfa sido secuestrada por Liuva, y Asier, con sus ojos despiadados y su rostro helado, le dijo a Liuva que la matara rapido.

Solo con su muerte, se eliminarian las barreras en el corazén de Cecilia, y él y Cecilia podrian estar juntos sin preocupaciones.

Fue entonces cuando se dio cuenta de que, en los ojos de Asier, su existencia era un obstaculo para la unién de él y Cecilia por el resto de sus vidas.

Después de dos dfas de alivio, ese dolor sordo en su corazén se habia calmado bastante, pero al ver a Asier otra vez, ese dolor sofocante y punzante volvi6 a resurgir.

Elia solo miré hacia Asier un momento antes de desviar la vista y bajar los ojos hacia la mesa. “iAsier, has llegado!” Vicente vio llegar a Asier y se adelanté para recibirlo con entusiasmo y alegria. Asier era su buen amigo; antes, habfan ido juntos al Club Real Galaxy més de una vez. Durante esos tres afios, Asier habia estado en coma, y él se habia dedicado a su carrera. Hacla mucho que los cuatro jovenes distinguidos de la capital no se reunfan.g2

Ahora que vefa a un Asier consciente y despierto, Vicente sentia una alegria especial, como si se reencontrara con un viejo amigo después de mucho tiempo.

Orson también se apresur6 a acercarse.

Vicente habia intentado tomar las riendas de la silla de ruedas de Bruno para empujar a Asier, pero Orson se adelanto.

Con naturalidad, como si fuera lo mas normal, del mundo, aparté a Bruno y tomé el manillar de la silla de ruedas de Asier para empujarlo él mismo.

Con emocion en su voz, Orson dijo: “Asier, han pasado tres anos, finalmente te vuelvo a ver. Parece que el Dr. Diaz es realmente un maestro en su oficio. No es de extrafiar que Elia, sin importar cudn caprichosas fueran las demandas del Dr. Diaz, acept6 para que él te tratara.”

Tan pronto como Orson terminé de hablar, Asier fruncié el cefio y gir6 la cabeza, su mirada profunda y afilada se dirigié hacia Orson: “;Qué has dicho?”

Orson se quedé perplejo bajo la mirada intimidante de Asier, poniéndose nervioso, ;habria dicho algo indebido?

“Ah, lo siento, no volveré a mencionar tu enfermedad en publico”, dijo Orson, pensando que Asier se preocupaba por cémo su reputacion se verfa afectada por mantener en secreto que habia estado postrado en cama durante tres afos y rapidamente se disculp6.

“No es eso, ;quién dijiste que trajo al Dr. Diaz?" La voz grave y seria de Asier no dejaba pasar ni el mas minimo detalle.

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Al escuchar la pregunta de Asier, Elia sintié un nudo en el corazén y levanté la mirada hacia Orson con preocupacion en sus ojos.

Orson sonri6 y dijo: “Por supuesto que fue Elia. Ella aceptd ayudar al Dr. Diaz a encontrar a un aprendiz

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con gran capacidad de aprendizaje y también accedié a buscarle una pareja en un sitio de citas, solo asi el Dr. Dfaz accedio a hacerte una visita. Asier, quizés no sepas, pero el Dr. Diaz tiene una personalidad peculiar. No es de los que aceptan tratar a la gente solo con dinero. Para hacer que él ofrezca sus servicios, tienes que jugar segtn sus reglas y contar con un destino dificil de entender.” ;Asi que fue Elia quien buscé al médico para tratar su enfermedad? Entonces, no era como su abuelo le habfa dicho, que Elia, al saber que él se habfa convertido en un vegetal, se habfa alejado de él, evitandolo y sin siquiera mirarlo una vez.

Asier solo habia escuchado las primeras palabras de Orson; el resto del contenido no le habia llegado. Sus ojos oscuros se dirigieron hacia Elia, que estaba sentada al borde del area de descanso.

Elia, que estaba mirando hacia alli sorprendida, encontré la mirada de Asier y sus ojos chocaron. Esos ojos profundos como el mar impactaron en los suyos, y el ambiente helado y opresivo golpe6 su corazon.

El corazon de Elia tembld, y rdpidamente bajo la vista, tomo el vaso de agua frente a ella y bebié un sorbo para ocultar su confusion y malestar.

"Asier, ;cOmo es que tienes tiempo para venir al campo de equitacién?” Orson empujaba a Asier hacia el &rea de descanso y le pregunté

Bruno iba a su lado y explicé: “He quedado con Tomeo para hablar sobre la compra de disefios de joyerfa. El Sr. Griera pronto regresara al Grupo Griera y vendra a supervisar mis negociaciones.” Capitulo 1513