¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 533

Capitulo 533

¢Y a tu hermanita Inés qué le gusta?”, le pregunté Asier, después de haber calmado el llanto de los nifios.

Si sabia sus gustos, seria mas facil manejar la situacion

"A Inés le gustan las antiguedades”, Iria levanté su gordita manita para limpiar las lagrimas de su rostro.

Asier mir6 a Inés, que segufa con el cefio fruncido, y le dijo “Hay un almacén de antigtiedades detras de la casa, puedes elegir cualquier objeto que te guste”

Inés olvido su llanto de inmediato, sus ojos infantiles y llorosos parpadearon emocionados.

Asier le volvi6 a preguntar a ina: ;Y a tu hermano Joel qué le gusta?'g2

“Mmm, le gusta mama...”

"Aparte de mama”

“Le gusta charlar”, respondi6 Iria. Sabfa que Joel era muy activo y que le encantaba hablar con la gente hasta cansarlos.

;Eso se consideraba un hobby?

Asier estaba confundido, pero rapidamente pensé en una solucién. Le dijo a Joel: “Si dejas de llorar, buscaré a diez personas para que charlen contigo”.

“No quiero diez personas, solo quiero a mama®, Joel lloro con todas sus fuerzas

Asier suspiro y volvié a preguntar a Iria, ;qué le gustaba a Abel?

Ina respondié “Usar tabletas electrénicas”

Tabletas electrénicas?

Asier penso en la tableta que encontré en la casa alquilada en el Barrio Santa Marta, la misma que se usd para robar mil millones al Grupo Griera

Miro a Abel con inquietud y pregunto: ;Y qué te gusta hacer con la tableta?”

“Jugar!”, respondi6 Abel, enfadado y a la defensiva.

Asier se relajo Claro, jcomo iba a ser un nifio de cuatro afios un hacker tan habilidoso?

En cuanto al presunto hacker, Asier planeaba investigarlo mas tarde.

“Te compraré una tableta, puedes jugar lo que quieras”, le dijo Asier

Si entendia sus necesidades, todo seria mas facil

“Pues no la quiero, Abel resoplé con actitud y se giro, alejandose con sus pequefas piernas.

Asier no le siguio, dejandolo ir Siempre y cuando no llorara delante de él

Asier se levanto y le dijo a Fabio "Cuida de ellos en el desayuno, después llévalos al mejor jardin de infantes de la ciudad”

Alrededor de la mesa solo estaban Inia, Inés y Joel Abel, atin enfadado, se encerré en su habitacion y se negd a salir

El nifio siempre habia sido obstinado, con una personalidad fria y decidida.

Asier les pidi6 a los otros tres niflos que comieran y dejo a Abel en paz por el momento

Los otros tres se quedaron quietos, mirandose

Asier se llevo la mano a la frente, sintiendose agobiado.

Elia habia estado dando vueltas en la cama hasta las nueve de la mafiana, adn sin poder dormir. Opto por levantarse, se cambi6 de ropa, se aseo y se dirigi6 a la Villa Serenidad

Las pocas horas sin sus hijos se sintieron como siglos

No podia esperar mas, tenia que verlos

Los nifios tenfan un reloj biolégico muy preciso, siempre se despertaban a las ocho

No sabia como estaban pasandola en la Villa Serenidad, no sabia si la extranaban